
Pero el ser humano
pareciera un ser sexual porque su mente se mantiene permanentemente
sexualizada. El solo mirar a un ser del sexo opuesto puede provocarle un
pensamiento de tipo sexual.
Esto es por la formación
e influencia mediática, tanto así, que un ser condicionado hasta podría omitir
la función sexual.
Una persona normal ve la
sexualidad solo como una de las tantas ocupaciones mentales de la vida.
Bien dice Roberto Carlos
en su canción: “Yo quisiera ser civilizado como los animales”.