Uno
de los mayores peligros de la vida es caer en la masificación del
comportamiento. Algo que ha existido por siglos, pero que los estudios de
ciencias modernas como la neurociencia y el conductismo entre otras están
corroborando.
Si
se crean necesidades masivas, se pueden producir artículos y servicios en serie
a bajo costo maximizando las ganancias y logrando al mismo tiempo el control
del dinero y del comportamiento social.
Es
una lógica simple y perversa pero efectiva; por eso vemos casi a toda la gente
haciendo o afanada por hacer lo mismo.
Somos
una sociedad con un comportamiento predeterminado.