junio 30, 2012

107- QUIEN PONE LAS REGLAS DEL JUEGO

Es realmente triste encontrarse en la situación en que aquel a quien alguien no le simpatiza y ostentando el poder manipula las reglas del juego con tal de neutralizar al que considera oponente atropellando toda la institucionalidad existente.

Nosotros lo vivimos en carne viva en una iglesia donde el líder principal con tal de menguar nuestro trabajo comenzó a manipular las reglas hasta el punto de que con argucia tras argucia nos dejó en el limbo, prácticamente expulsados de la iglesia.
Llegó al punto de darle una especie de golpe de estado al consejo de diáconos que no eran manipulables para imponer los que él quería; así lo dijo claramente desde el púlpito: “estos hermanos son con los que yo quiero trabajar”. Esa vez hasta abolió las tradicionales elecciones. Con su soberbia y su poder institucional estaba imponiendo su voluntad caprichosa.

Este pastor que aún recordamos con dolor pero sin rencor tenía incluso el semblante de un presidente suramericano que ha lucido las mismas características en su gobierno.
Abocó el poder total para poder ignorar al congreso en la promulgación de leyes y en menos de dos años lleva como cincuenta leyes emitidas calzadas a su antojo.
En ambientes así, qué esperanza puede tener cualquier persona del respeto a la institucionalidad y a la estabilidad de las reglas del juego, si el cualquier momento pueden ser manipuladas al antojo de cualquiera que teniendo el poder se le ocurra cualquier cosa.
Ni quisiéramos decirlo, pero con mucha pena algo similar está ocurriendo en nuestro país entre el poder judicial y el legislativo. Un tremendo impasse para la toma de posesión de los nuevos magistrados por falta de un acuerdo sensato y civilizado; así que a sacar chispa, a crispar los ánimos, a imponer nuevas reglas del juego y he ahí el resultado: un nuevo decreto para apartar al oponente y hacer lo que una de las partes quiere hacer a toda costa y sin considerar ninguna otra alternativa.

Es triste, es vergonzoso y hasta inhumano que los que nos consideramos personas civilizadas no podamos ponernos de acuerdo y se nos sea tan difícil respetar las reglas del juego.
Es la más alta demostración del pecado del irrespeto que viene desde los primeros seres humanos en el huerto del Edén y por el cual fueron echados a sufrir las inclemencias provocadas por ellos mismos.

junio 29, 2012

106- O ME DAS CHANCE O TE APARTO

Así como cuando en pleno tráfico un conductor abusivo se nos pone a la par y con prepotencia nos obliga a dejarlo entrar en la fila;
Así como ya muchos casos de usuarios que irrespetan la autoridad de los vigilantes en diversos establecimientos y los han obligado a utilizar sus armas para someterlos terminando en tragedias;
Así como existen tantas usurpaciones de propiedades en densas colonias en donde sus propietarios son obligados a huir o no volverse a acercar y que están claramente identificadas por las autoridades inanimadas.

Y así como muchas otras situaciones de abuso, anarquía, prepotencia e irrespeto en nuestra sociedad, resulta que los máximos poderes del estado están en una constante pugna de decretos por un lado y sentencias por el otro en una clara guerra de orgullo y soberbia: O ME DAS CHANCE O TE APARTO.
Lo más triste es que la solución que vislumbran la mayoría de analistas es de lo más sencillo que a cualquiera se les pudiera ocurrir: la ratificación de los funcionarios en polémica sin sobresaltos ni cambios bruscos de ningún tipo.
Pero al final, aquí lo que menos importa es la SOLUCION; sino quien hará valer su prepotencia.

Eso es lo que vemos arriba en las altas esferas; y eso es lo que vemos abajo en el día a día por las calles de la sociedad atiborrados del lodo de la soberbia.
¡Ah!, sociedad más desquebrajada en el desarrollo y madurez del irrespeto.

junio 22, 2012

105- EL IMPERIO DE LA LEY (DEL MAS FUERTE)

Nos encontramos a años luz de vivir en un pleno estado de derecho como en las sociedades desarrolladas; y eso lo vemos todos los días cuando cualquiera se cruza los semáforos en rojo, las dobles líneas amarillas o circula sin luces; choferes de transporte público sin licencia, drogados o con sendas deudas de infracciones; personas impuntuales a sus compromisos, que no pagan sus impuestos o simplemente que no escuchan a su interlocutor.
Esta es nuestra sociedad y como toda la institucionalidad y los gobiernos son fiel representación de la sociedad por antonomasia arrastran toda esta endemia de irrespeto.

En este momento nos encontramos ante un hecho para muchos inédito en la historia del país: el poder judicial y el poder legislativo enfrentados por el cumplimiento de una sentencia.
Para nosotros los ciudadanos normales nos resulta fácil entender que una sentencia es simplemente una ley surgida del funcionamiento de la institucionalidad y como tal debe ser acatada. Ni siquiera nos interesa quien pudiera tener la razón porque para eso es la institucionalidad, para dirimir.
Lo mismo ha sucedido en otra institución del estado por medio de un laudo arbitral, que se sobreentiende que surge a través de un proceso institucional para conciliar una situación dada; pero igualmente los titulares no están dispuestos a acatar.

Desde las altas esferas vemos con claridad el funcionamiento con gran pomposidad del IMPERIO DE LA LEY, pero la LEY DEL MAS FUERTE, que es lo que vemos todos los días en las calles en una casi sistemática anarquía donde el más fuerte impone su voluntad por la fuerza sin importarle en lo más mínimo la más elemental norma de comportamiento.

junio 04, 2012

103- NO ES LA PROFESION MAS ANTIGUA DEL MUNDO

Es una verdadera pena que hasta en los círculos más importantes, formales e intelectuales se utilice el término “la profesión más antigua del mundo” para referirse a la prostitución.
Quienes la utilizan solo tienen dos posibles razones: justificar la práctica o simplemente ignorancia.

Es importante distinguir la diferencia entre los términos profesión y oficio.
Existen extensos estudios sobre los origines de las actividades profesionales, llegando muchos a épocas bíblicas, la antigua china y hasta los que equiparan el surgimiento de su concepción actual con la revolución industrial en el siglo XVIII.
Los principales teóricos económicos distinguían las ocupaciones (oficios), referidas a trabajos comunes que requerían ciertas habilidades manuales, de las profesiones, que implicaban la realización de operaciones intelectuales que requerían credibilidad y reputación en la sociedad, por lo que se adquirían a través de la ciencia y de la instrucción.
Nótese entonces que la diferencia esencial radica en la preponderancia relativa del esfuerzo físico y mental.
Es lógico que los oficios requieran algún conocimiento básico sobre como realizar la tarea física; pero la profesión requiere una preparación metódica y amplia que implica una acreditación universitaria para garantizar de alguna manera su licenciamiento en la ejecución de dicha actividad.

Por eso, cuando nos preguntan por nuestra profesión u oficio, nos están preguntando: ¿Qué has aprendido a hacer? ó ¿Para qué has estudiado?. Y de ahí que respondemos: carpintero ó profesor. Incluso, no sería raro encontrarnos con un carpintero y profesor a la vez.
Esto, debido a que a muchos se nos fue inculcado por nuestros padres aprender un oficio y seguir estudiando, en parte por las condiciones precarias de nuestros países donde no se garantiza la educación superior; por eso es común que muchos aprendan un oficio para costearse sus estudios universitarios.

Volviendo entonces a nuestro tema de origen, la tal mal llamada “profesión más antigua del mundo”, en realidad a duras penas podría llegar si acaso a nivel de oficio atropellando todas las consideraciones morales y de respeto a la misma dignidad femenina.
Y no le busquemos símiles o hilos en la historia, porque acaso la primera necesidad que el hombre tuvo fue la de comer; por eso tanto en la débil teoría evolucionista como en la creacionista se ve al hombre cultivando, antes que cualquier otra cosa (la historia de Abel y Caín, los primeros hombres).
Además, para poder pagar por servicios sexuales tiene que haber necesariamente una previa actividad económica.
Así que ya no tenemos excusa para volver a utilizar tan maliciosa oracioncita.

DERECHOS RESERVADOS © 2009-2018 REFLEXIOTECA | EL SALVADOR | reflexioteca@gmail.com